Y con esto se supone que me presento, abro el blog y os doy
la bienvenida. Pues bien, no son palabras bonitas las que tengo para vosotros,
no os voy a decir que escribo para que me leáis, que espero que disfrutéis con
mi trabajo ni demás memeces.
Escribo y sostengo este blog para mí, nada más que para mí, para celebrar mi
onanismo y sacudirme la necesidad de escupir un poco de mierda de vez en cuando,
porque me apetece.
Mucha gente recurre al autoengaño, comienza a escribir
pensando en los demás, para obtener reconocimiento. Eso podía tener valor hace
unas cuantas décadas, hoy en día, con la cantidad de blogs que existen ¿quién
se lo va a creer? Algunos alcanzarán algún éxito, enhorabuena, habéis tenido
suerte, otros se consolarán pensando que un par de fieles marujas les siguen y
les comentan. Otros lo dejan todo a medio hacer por no encontrar la motivación
necesaria, por la falta de apoyo, porque no disfrutan escribiendo.
Pero yo escribo para mí, soy un egoísta y vosotros no sois
mi público, sois mi vara de medir, sois la herramienta con la que voy a
trabajar, los observadores que alteren la realidad de mis publicaciones.
En este blog vais a encontrar de todo y no todo va a tener
un mínimo de calidad literaria, porque ese no es el objetivo, tampoco
encontraréis información y actualidad periódica, pues no es el objetivo.
Encontraréis un montón de mierda, pensamientos que me ronden, historias que se
me ocurran, palabras que me invente y faltas de ortografía. Al que le interese
y le guste eso, perfecto, tiene un problema y le aplaudo por ello, pero que no
venga nadie a comerme la polla y tampoco a criticar lo que hago, aquí no hay
rincón para la polémica, tú lees, yo escribo, punto.
Y hasta aquí por hoy.
Y hasta aquí por hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario